¿Qué es una reducción de estómago?
¿Busca información sobre la reducción de estómago y los especialistas en cirugía de la obesidad? El término reducción de estómago se refiere a los procedimientos quirúrgicos que reducen la capacidad del estómago. El objetivo de la cirugía de reducción de estómago es ayudar a los pacientes obesos a perder peso de forma eficaz a largo plazo, al tiempo que se les ayuda a recuperar unos hábitos alimentarios saludables y un nuevo estilo de vida. Las cirugías de reducción de estómago representan una nueva esperanza para los pacientes que han intentado perder una gran cantidad de peso en el pasado pero no han tenido éxito. Existen otras soluciones, como el balón gástrico.
Hay millones de personas en el mundo que sufren problemas de salud relacionados con la obesidad y el sobrepeso. En muchos casos, la dieta y el ejercicio ya no son tratamientos eficaces y deben considerarse otras opciones. Hoy aprenderá todo sobre la reducción de estómago, incluyendo qué es, sus beneficios, los tipos de operaciones disponibles, etc.
La reducción de estómago puede definirse como una intervención (diferentes procedimientos) que se realiza principalmente en pacientes con obesidad mórbida. Esta intervención tiene como objetivo reducir el tamaño del estómago en un determinado porcentaje para que el paciente se sacie pronto, controle el deseo de comer entre horas y, en consecuencia, pierda una cantidad significativa de peso.
Pero, ¿qué es la obesidad?
La obesidad se define por un exceso de peso para una determinada estatura, debido a un aumento de la masa grasa. Existe una forma sencilla de saber si tiene sobrepeso o es obeso. Puede calcular su IMC (IMC = peso (kg) / altura (m)2). Un IMC de 24,9 define a una persona con sobrepeso, y un IMC de 29,9 o más puede considerarse obeso.
Se ha convertido en una enfermedad que suele ir asociada a otras patologías, como diabetes, hipertensión, problemas cardíacos o respiratorios, ya que la prevalencia de la obesidad en el mundo desarrollado sigue aumentando. La cirugía de reducción de estómago es actualmente el tratamiento más eficaz para la obesidad mórbida, es decir, en los casos en los que el peso del paciente supone un riesgo para la salud además de un problema estético.
En las últimas décadas, las técnicas han avanzado significativamente, y cada vez son más las personas que consiguen un peso saludable gracias a este tipo de intervención quirúrgica. Sin embargo, es esencial tener en cuenta que, como en cualquier intervención quirúrgica, hay una serie de riesgos asociados a la operación de reducción de estómago que deben evaluarse.
Estas complicaciones potenciales se tratarán un poco más adelante en este artículo, pero antes es importante identificar a aquellas personas que, por una razón u otra, pueden ser candidatas a uno de los procedimientos quirúrgicos disponibles para la pérdida de peso.
En general, la cirugía bariátrica -término utilizado para describir una operación de reducción de estómago- es un procedimiento que reduce el tamaño del estómago con el objetivo de que el individuo se sienta saciado antes al consumir y, como resultado, pierda peso. Si, a pesar de hacer dieta y ejercicio diario, no ha perdido peso y su salud corre un riesgo cada vez mayor, su especialista puede aconsejarle que se someta a uno de estos procedimientos.
¿Para quién está indicada una reducción de estómago?
La reducción de estómago sólo debe considerarse y está indicada en personas con sobrepeso severo (IMC > 40). Se considera un último recurso si los intentos anteriores de pérdida de peso controlada no han tenido suficiente éxito. La reducción de estómago también puede realizarse en personas que ya tienen una enfermedad secundaria de sobrepeso y un IMC > 35.
La cirugía bariátrica tiene como objetivo principal:
- Adultos (mayores de 18 años) con obesidad significativa cuyo índice de masa corporal o IMC (calculado dividiendo el peso por la altura al cuadrado) es superior a 40 kg/m².
- Adultos con obesidad grave cuyo IMC sea superior a 35 kg/m² y que tengan al menos otra enfermedad -diabetes de tipo 2, hipertensión arterial, síndrome de apnea del sueño, trastornos respiratorios graves, etc.- que pueda mejorar con este tipo de cirugía.
En todos los casos, la cirugía de la obesidad sólo puede plantearse tras el fracaso de un tratamiento médico bien gestionado -realizado por un equipo multidisciplinar (médico de cabecera, nutricionista, dietista, psicoterapeuta o psiquiatra…)- durante seis a doce meses. Este tratamiento debe haber implicado cambios en la dieta, actividad física y, posiblemente, atención psicológica.
El fracaso se define como la ausencia de una pérdida de peso suficiente o la imposibilidad de mantener la pérdida de peso a pesar del tratamiento médico. Antes de la cirugía de la obesidad, el paciente debe estar bien informado y haber aceptado la necesidad de un seguimiento médico y quirúrgico a largo plazo.
¿Por qué es necesario someterse a una reducción de estómago?
La obesidad es una de las condiciones que contribuyen a la aparición o progresión de enfermedades como la hipertensión, la diabetes y la cardiopatía isquémica. La obesidad contribuye al deterioro de la salud de cualquier paciente y puede tener consecuencias fatales si no se trata.
El paciente seguirá perdiendo peso como resultado de la reducción de estómago, y esto, junto con una dieta sana y una actividad física controlada, se traducirá en una mejora general de su calidad de vida. Para muchos pacientes que no tenían otras opciones médicas, la reducción de estómago representa un antes y un después.
¿Qué tipos de reducción de estómago existen?
Existen varias técnicas para reducir el tamaño del estómago. Todas tienen sus ventajas e inconvenientes y son adecuadas para distintos perfiles de pacientes. La cirugía de la obesidad pretende mejorar la salud del paciente obeso mediante una pérdida de peso sostenible combinada con un tratamiento nutricional de por vida.
Dependiendo de la edad, la salud del paciente y el tipo de obesidad, la técnica utilizada varía. Existen dos tipos principales de técnicas quirúrgicas:
- Técnicas puramente «restrictivas», que reducen el volumen del estómago y, por tanto, frenan el paso de los alimentos, sin alterar su absorción (anillo gástrico, gastrectomía en manga).
- Técnicas mixtas (bypass en Y, por ejemplo): tanto restrictivas como «malabsortivas» (que conducen a una reducción de la cantidad de nutrientes absorbidos y, por tanto, a una mayor pérdida de peso).
La banda gástrica
La banda gástrica, también conocida como gastroplastia, consiste en colocar una banda ajustable alrededor de la parte superior del estómago, creando una pequeña bolsa. Esta bolsa se llenará pronto con una pequeña cantidad de comida, provocando una sensación de saciedad. La comida pasará gradualmente a la segunda parte del estómago, como un reloj de arena. El paciente tendrá entonces que cambiar sus hábitos alimentarios y aprender de nuevo a comer despacio para no bloquear el paso de los alimentos. La banda puede ajustarse mediante una caja que se coloca bajo la piel y se conecta directamente a la banda. Para ajustar la banda, hay que anestesiar localmente la piel e inyectar unos centímetros cúbicos de líquido en la caja, que inflará la banda gástrica y la ajustará.
Gastrectomía en manga
La gastrectomía en manga extirpa 2/3 del estómago y, en particular, la parte que contiene las células que segregan la grelina (la hormona del apetito). El apetito se reduce directamente, el estómago se transforma en un tubo vertical que dejará pasar rápidamente los alimentos al intestino. Se preserva así la absorción de los alimentos.
© Dr Levent Efe, courtesy of IFSO
Bypass gástrico
El bypass gástrico es un procedimiento mucho más complicado, aunque no se extirpen órganos. En esta cirugía, el cirujano corta el estómago y conecta el esófago directamente al intestino delgado mediante un cortocircuito. Los alimentos se asimilan menos al pasar directamente al intestino delgado, lo que obliga a los pacientes a tomar suplementos vitamínicos de por vida y a someterse a controles periódicos para evitar carencias. Durante este procedimiento, la sutura se realiza al pie del asa y en forma de Y, lo que constituye la principal diferencia entre el bypass y el minibypass.
© Dr Levent Efe, courtesy of IFSO
El mini bypass gástrico
El mini bypass es una técnica reciente y cada vez más realizada que sólo es mini de nombre. Durante esta operación, el cirujano hará una pequeña bolsa en el estómago y creará una única sutura, formando un bucle en forma de omega.
Cruce duodenal
Una parte sustancial del estómago, el 80% para ser exactos, se extirpa del cuerpo en este procedimiento altamente eficaz. Así, se preserva el píloro, la válvula responsable de la evacuación gástrica, y se mantiene el paso natural de los alimentos del estómago al intestino delgado. En general, la reducción gástrica produce una pérdida de 5 a 10 kilos al mes durante el primer año.
Se trata de un método muy eficaz que evita que los pacientes se sientan mal tras consumir alimentos sacarinos y ralentiza su entrada en el intestino delgado. Los riesgos de esta técnica dependen de la habilidad del cirujano que lleve a cabo el procedimiento.
© Dr Levent Efe, courtesy of IFSO
Derivación biliopancreática
Se extirpa una porción del estómago y la pequeña bolsa restante se conecta al extremo del intestino delgado, evitando así la porción superior de los intestinos. En este lugar, los fluidos digestivos biliares y pancreáticos se mezclan antes de entrar en el colon a través de un canal común. El paciente pierde peso porque casi todas las calorías y nutrientes no se asimilan en el colon.
© Dr Levent Efe, courtesy of IFSO
¿Cuáles son los resultados de una reducción de estómago?
La intervención bariátrica no es una cura milagrosa para la obesidad. Antes de someterse a la cirugía, es crucial que el paciente comprenda que la intervención quirúrgica es sólo el principio de un tratamiento mucho más completo, que requiere que el paciente colabore a lo largo del tiempo modificando sus hábitos de vida, sobre todo en lo que se refiere a la dieta. El compromiso del paciente será el factor más esencial para lograr los resultados deseados de la reducción de estómago y mantener el nuevo peso a lo largo del tiempo.
Dada su importancia, el especialista hará hincapié en este aspecto, ya que la cirugía bariátrica será poco beneficiosa para el paciente si no se adhiere a las recomendaciones de su médico. La mayoría de los pacientes de cirugía bariátrica pierden entre 5 y 10 kilos al mes durante el primer año. Con el tiempo, la pérdida de peso del paciente se estabilizará, pero a medida que modifique sus patrones alimentarios y realice más actividad física, seguirá perdiendo kilos. En consecuencia, la persona operada reducirá hasta el cincuenta por ciento de su exceso de peso en los dos primeros años tras la intervención. Si persisten con una dieta líquida o blanda después de la cirugía, su pérdida de peso será mayor.
Ventajas de una reducción de estómago
Además de los riesgos asociados a la cirugía de reducción de estómago, es fundamental tener en cuenta las numerosas ventajas para la salud y el estilo de vida que este procedimiento aportará al paciente. En conclusión, lo más interesante para el paciente será saber que la mayoría de los que se han sometido a uno de estos procedimientos quirúrgicos consiguen su objetivo, es decir, recuperar su peso normal, y que su vida mejorará como consecuencia de ello, ya que además de ganar movilidad y sentirse mejor consigo mismo, muchas dolencias relacionadas con la obesidad pueden mejorar o incluso desaparecer.
Lo más esencial es acudir a un médico competente que le aconseje sobre el mejor tratamiento para su dolencia y le explique todo el procedimiento, advirtiéndole de las posibles complicaciones. Además, el paciente debe comprometerse de por vida a cambiar sus hábitos alimentarios y dejar de ser sedentario después de la cirugía para garantizar el éxito del tratamiento. Este es el único método para mantener los resultados quirúrgicos. Además de someterse a exámenes médicos periódicos para asegurarse de que todo marcha bien, deberá seguir las recomendaciones del nutricionista.
¿Cuáles son los riesgos?
Como se ha mencionado al principio, y a pesar de los numerosos beneficios de la reducción de estómago, la operación no está exenta de riesgos, y en raras ocasiones puede incluso poner en peligro la vida – en el 1% de los casos, y se trata normalmente de personas con enfermedades comórbidas graves, que es el riesgo real de someterse a esta cirugía. Los peligros asociados a la reducción de estómago dependerán en gran medida del nivel de experiencia del cirujano. Sin embargo, existen complicaciones inherentes a esta técnica que deben comprenderse y aceptarse, además de otros posibles inconvenientes que pueden surgir siempre que una persona se somete a una intervención quirúrgica y los derivados del uso de anestesia general. Estos problemas son:
- Hemorragias.
- La sangre puede coagularse.
- Infecciones.
- Hipersensibilidad inducida por fármacos.
- Dificultades respiratorias.
Entre las posibles desventajas del propio procedimiento de reducción gástrica se encuentran:
- Lesión quirúrgica del estómago, los intestinos o los órganos.
- Fuga de la vía causada por el grapado de dos secciones gastrointestinales.
- Gastritis.
- Nutrición deficiente.
- Fibrosis abdominal, que puede obstruir los intestinos.
- Vómitos como consecuencia de consumir más alimentos de los que puede contener el nuevo estómago.
Como consecuencia de estas alteraciones del aparato digestivo, se producirán deficiencias en la absorción de ciertos nutrientes y vitaminas, lo que requerirá un cambio en los hábitos alimentarios. Para controlarlo, se vigilará con frecuencia al paciente para asegurarse de que no sufre anemia ni carencia de proteínas. Dependiendo de la técnica empleada, puede ser necesaria la administración de suplementos vitamínicos y de vitamina B12 de por vida. Los cambios en la estructura del intestino pueden aumentar el riesgo de formación de cálculos biliares y hacer necesaria la extirpación de la vesícula en un 15%.
¿Se puede revertir una reducción de estómago?
No todos los procedimientos de reducción de estómago son reversibles. Por ello, debe consultar previamente a su médico para decidir qué método es el más adecuado en cada caso. Aunque la banda gástrica puede retirarse con éxito, la gastrectomía vertical o sleeve gástrico y el bypass gástrico no suelen ser reversibles.
Alternativas a la reducción de estómago
Una alternativa no operativa a la reducción de estómago es el balón gástrico. Mientras el paciente duerme, se introduce un globo en el estómago a través de un endoscopio y se llena de líquido. El globo de deglución permanece en el estómago durante unos 6 meses y luego se retira.
¿Qué médicos y clínicas están especializados en la reducción de estómago?
La reducción de estómago es realizada por cirujanos bariátricos. En Andalucía, la Dra. Ana García Navarro es Miembro de la Asociación Española de Cirujanos (nº socio 3167), de la Asociación Andaluza de Cirujanos, de la Sociedad Española de Cirugía de la Obesidad Mórbida y Enfermedades Metabólicas (nº socio 141) y de la International Federation for the Surgery of Obesity and Metabolic Disorders (IFSO).
¿En qué consiste la evaluación médica previa a la cirugía?
Antes de la operación de reducción de estómago, el equipo médico que sigue al paciente realiza una evaluación médica y quirúrgica. Incluye, en particular:
- una evaluación y gestión de las enfermedades asociadas (diabetes, apnea del sueño, etc.)
- una evaluación del comportamiento alimentario del paciente y la gestión de los posibles trastornos alimentarios
- una evaluación nutricional y vitamínica y la corrección de cualquier carencia (deficiencias nutricionales)
- una evaluación de la capacidad de masticación
- una endoscopia para explorar el esófago, el estómago y el duodeno
- la búsqueda del Helicobacter pylori, responsable de las úlceras de estómago
Por último, una evaluación psicológica o psiquiátrica, en busca de contraindicaciones, es esencial para todos los pacientes candidatos a la cirugía bariátrica.
¿Qué información debe darse antes de la intervención?
Antes de la operación de reducción de estómago, el equipo médico que sigue al paciente debe explicarle los mecanismos, beneficios, riesgos y limitaciones de la cirugía bariátrica seleccionada: banda gástrica ajustable o gastrectomía en manga, por ejemplo. Esto se debe a que el futuro paciente debe comprender las razones por las que es necesario un cambio en el comportamiento alimentario y en el estilo de vida (actividad física regular), antes y después de la operación. El equipo médico también debe informar al paciente sobre la necesidad de un seguimiento médico y quirúrgico de por vida y la posibilidad de una cirugía reconstructiva después de la cirugía bariátrica. Incluso si la cirugía es eficaz, es posible el fracaso a largo plazo. También es esencial que el paciente sepa quién será el contacto médico o quirúrgico después de la cirugía.